lunes, febrero 11, 2008

PASTORAL
*
A la serena duerme mi ganado...
Miguel Hernández
*
A un cordero que es entre los rebaños
lo que un muchacho hermoso entre la gente
lo quiero con cariño diferente,
más propio de un rapaz que de mis años.
*
Come en mi mano; bebe de los caños
de metal renegrido de la fuente;
me bala, y su balido sonriente
inunda de dulzor los aledaños.
*
Esta mañana en que yo estoy bordando
greces en un mantel, y canta el tordo,
y mi cordero bala casi hablando,
*
mientras él bala y brilla el sol y bordo,
me pregunto si lo querré igual cuando
envejezca y se vuelva fuerte y gordo.
***
CARMEN JODRA DAVÓ, Las moras agraces. Ilustrado por Estupor con una pintura anónima del Museo Lázaro Galdiano, titulada Salvador Adolescente.

2 comentarios:

samsa777 dijo...

Muy hermoso.

Anónimo dijo...

mientras tanto yo seguiré buscando para absurdita una mariposa polilla de oro suspendida en un collar engarzado hace mil años.